domingo, 22 de noviembre de 2009

La utopía de la amistad

En los comienzos de la vida la amistad era sólo un juego...Era de compartir el espacio el mundo, para representarnos un papel en él , de hacer con el otro a puro placer, a puro descubrimiento...Había también decepciones, rivalidades y golpes bajos, que se resolvían sin más con una simple pelea. Hasta allí llegábamos. Y la vida seguía de lo más tranquila su curso.La amistad no era un trampolin para las conveniencias ...
Hubo un tiempo, en la juventud ,donde se instalaron las pruebas que los amores de pareja imponían las amistades... El escenario habia cambiado....La amistad se transformó
de golpe en ese recurso escondido ,donde uno terminaba refugiándose ante los fracasos del amor...Allí uno encontraba ese lugar para aliviar las penas, consolarse ,masticar los odios, y también encontrar fuerzas para seguir...
En la adultez los amigos vienen a ser el indispensable cable a tierra que nos ayuda a sostenernos de pie ante las destemplanzas de la vida .Uno puede o no ser amigo de su pareja....Si se arma además del amor , la amistad, la cosa se puede sostener amortiguando los excesos de la pasión.Si sólo está la pasión , pero no la amistad, la pareja pareciera estar condenada al sufrimiento...Uno encuentra en algún personaje de la historia , llamar a una mujer esposa y amiga... Considerar al amante amigo, confidente, interlocutor.... Pudiera sonar entre cursi y naive tal modo de hablar...Pero no, hay allí un grano de verdad que se deja oir.Es necesario en el lazo amoroso, amortiguar el exceso pasional que se vuelve posesividad , envidia u odio, con el manto sutil de la amistad, que nos vuelve un poco más tolerantes con el otro, y también con nosotros mismos.
La amistad es el desapasionamiento del amor, para los cual requiere amortiguar las pasiones que nos despierta la sexualidad.
Y que por eso se nos revela como utópico, porque supone poder renunciar a las esclavitudes de nuestro narcisismo...Tenemos que dejar de amarnos apasionadamente a nosotros mismos. Eso es el narcisimo, un amor apasionado y ciego por nuestra imagen , por nuestros fetiches, por los brillos que creemos ver en los espejismos donde deambulamos....
Tener un amigo es entonces disimular sus excesos y los nuestros,tendiendo un velo piadoso sobre lo obseno de las pasiones...Siempre son las pasiones narcisísticas las que acaban con la amistad.
Y allí andan, los más empavesados, solos y mustios, ya grandes, aferrados al fetiche que les deuelve una imagen brillante y consistente que les permite , en su vanidad, desentenderse del desamor de los otros...
Sólo, que como nos enseña el tango, la decrepitud nos transformará en solos , fané y descangallados, allí donde una vez creimos ser bellísimos, brillantes e inalcanzables...
Envejecer es aprender en carne propia el valor de la amistad...
Y a sostenernos en la utopía de construir nuestro pequeño guetto de amigos...Allí donde soportar la inclemencia de la vida. Pasándola sin duda alguna, mucho mejor, que quienes cínicamente descreen de esta utopía de la amistad posible....

2 comentarios:

Minombresabeahierba dijo...

y el compañerismo en las malas..de salud...en la enfermedad...como dide el cura cuando se casan entre sonrisas y pocos se acuerdan.
besos

Anónimo dijo...

muy bueno